Un grupo de jóvenes y señoritas de la provincia de Canchis, sensibiliza a la sociedad en las fiestas de navidad, en no abusar de los fuegos  artificiales, cuidando a nuestras mascotas debido a que los fuegos artificiales y las mascotas no se llevan bien.
Puesto que fiestas pueden convertirse en una odisea para nuestros animales. Pero podemos ayudarlos.
Las mascotas no siempre festejan en las fiestas de fin de año. La pirotecnia hace que estas fechas no sean las mejores para ellos.
Es que los animales tienen el sentido del oído más sensible que el del ser humano. El ruido típico de un petardo se asemeja, para ellos, al de un trueno.
En estas fiestas cuidar a nuestras mascotas es diferente para perros o gatos. Los gatos deben contar con un lugar seguro para esperar a que pase el momento de los fuegos artificiales. Por ejemplo, un armario en el que no haya nada que pueda romper ante una reacción inesperada ni ningún objeto peligroso para su propia integridad.
Para los perros, en cambio, hay más opciones a tener en cuenta. Lo primero que hay que decidir es si se los deja solos o no.
Si se decide a dejarlo solo, no hay que atarlo, ni dejarlo en lugares donde pueda dañarse. Por ejemplo, terrazas o balcones donde haya una baranda baja, habitaciones vidriadas, espacios con objetos potencialmente peligrosos (herramientas, elementos punzantes, cortantes, lámparas o botellas).
En cambio, si el dueño decide llevarlo a otra casa no hay que sobreprotegerlo ante las manifestaciones de temor del animal.
Esto no significa que no haya que prestarle atención, sino que no hay que exagerar. Es preferible cierta indiferencia a la sobreactuación.
También se puede optar por sedarlo. Pero siempre hay que hacerlo bajo control veterinario. Nunca automedicarlo, son algunos de los consejos en estas fiestasde navidad pero lo mejor es evitar el malestar de las mascotas y disminuir el uso exagerado  de la pirotecnia.